Sobreestimulación Sensorial ¿Cómo Nos Afecta?
Como hemos mencionado en artículos anteriores, el Sistema Nervioso Central procesa toda la información proveniente del medio ambiente, tanto interna como externamente en nuestro organismo, a través de vías neuronales aferentes (reciben información) y vías neuronales eferentes (llevan información para emitir una respuesta). Cuando un niño o adulto neurotípico o neurodivergente está expuesto a una gran cantidad de información sensorial, el cerebro puede presentar dificultad para interpretar todos los estímulos o información a la vez, por lo que el cerebro no puede centrarse en procesar la información; por lo que la sobrecarga sensorial tiene un impacto significativo en la vida diaria, afectando la capacidad de un niño o adulto para participar en actividades sociales, deportivas, profesionales y educativas.
Las señales más comunes de la sobreestimulación sensorial son: Irritabilidad, falta de concentración, dolor de cabeza, mareos, vómitos, náuseas, ansiedad, inquietud, niebla mental, necesidad de quitarse una prenda de vestir o irse de un determinado lugar, incomodidad, taparse los oídos o los ojos, sueño o incluso dificultad para dormir, fatiga, agotamiento, ataques de pánico.
Es importante que sepas identificar en ti o en tu hijo neurotípico o neurodivergente los estímulos que suelen causar sobrecarga y evitarlos o minimizar su impacto. Es imprescindible conocer en tu niño qué le gusta y qué no y sus niveles de tolerancia ante un estímulo y partiendo de ahí:
- Implementar rutinas diarias, lo que puede proporcionar una estructura predecible que ayude a reducir la posibilidad de enfrentarse inesperadamente a estímulos abrumadores.
- Crear un entorno que limite los estímulos sensoriales excesivos que le causen malestar. Esto puede incluir reducir el ruido de fondo, utilizar iluminación suave, mantener un espacio ordenado y tener áreas donde se pueda disfrutar de la tranquilidad o una zona de relajación que le permita autorregularse y refugiarse de los estímulos que lo están sobrecargando.
- Disminuir la exposición a luces fluorescentes brillantes o parpadeantes o a las luces led, muy de moda hoy en día.
- Disminuir la exposición al ruido fuerte.
- Evitar o disminuir el uso de ropa que te diga que no le gusta.
- Usar lentes de sol.
- Usar audífonos con reducción de sonidos.
- Utilizar detergentes sin olor.
- Evitar o disminuir olores como perfumes, cremas, ambientadores fuertes.
Susana Pereira - Terapeuta Ocupacional - Terapeuta de Conducta
Educadora en Masaje Infantil
Valencia - España
Bibliografía consultada: https://www.aspergerparaasperger.org/blog/que-es-sobrecarga-sensorial/
https://altascapacidadescantabria.com/sobreestimulacion-sensorial-navidad/