Mejoran la autonomía, seguridad y autoestima

Los niños necesitan orden y seguridad y una forma de proporcionárselos es estableciendo y respetando las rutinas en su día a día.

Las rutinas favorecen el aprendizaje, facilitan la adquisición de nuevas habilidades y ayudan en aspectos esenciales, como el aseo personal, comida, sueño y deberes, favoreciendo la autonomía, autoestima y seguridad de tu hijo o hija.

Positivas para la salud.

Cumplir con la rutina durante las comidas, beneficia el funcionamiento del sistema digestivo, ya que el estómago se acostumbra a trabajar a horas determinadas, mejorando el apetito, la digestión y la necesidad de consumir alimentos entre comidas.

Así mismo, cumplir ciertas actividades antes de ir a la cama, ayuda al niño a conciliar el sueño y mejora el descanso. Rutinas sencillas como cepillarse los dientes, leer un cuento o cantarle una canción pueden ofrecer resultados maravillosos.

En el caso de niños con Condiciones del Neurodesarrollo, como Trastorno del Espectro Autista (TEA), las rutinas ofrecen estructura y les permite anticiparse a lo que va a suceder, disminuyendo la ansiedad y el estrés ante los imprevistos.

No se trata de llenar todas las horas con actividades, ni de ser inflexibles. Las rutinas deben ser aliadas de la educación y no verse como camisas de fuerza. No pasa nada si un día no podemos cumplirlas, pero es importante ser constante y disciplinados para obtener mejores resultados.

Recuerda siempre que cada niño es único y debes tener en cuenta sus preferencias, fortalezas y debilidades. Consulta con un especialista.

Solimar Rodríguez - Terapeuta de Conducta

Venezuela - USA