La prensión se refiere a las habilidades motrices de la mano y muñeca, básicamente, hablamos de la motricidad de la pinza digital o motricidad fina, que nos lleva a la manipulación de objetos y a la escritura, la cual va evolucionando al pasar del tiempo.

Cuando nacemos, tenemos una prensión dígito palmar. Esta prensión sujeta el objeto con la palma de la mano y sus cuatro dedos, excluyendo al pulgar, ocurre aproximadamente, hasta los 5 meses.

Hacia los 6 meses, tenemos la prensión radio palmar, donde el bebé comienza a usar su pulgar y su agarre es más estable y fuerte, inclusive ya es capaz de tomar su biberón por sí mismo y otros objetos de diferentes tamaños, no tan grandes ni pesados.

En la prensión radio digital, hacia los 8 meses, el bebé comienza a agarrar objetos con sus pulpejos; para dar inicio al movimiento más libre entre el pulgar e índice.

A los 12 a 18 meses, el lactante comenzará a poner bloques juntos y será capaz de realizar marcas con colores en un papel, incluso en las paredes.

Para la edad preescolar, (2 a 5 años), puede cerrar y abrir las manos haciendo combinaciones con los dedos, es cuando comienza el aprendizaje del uso de tijeras, abrochar, desabrochar, subir y bajar cierres.

En la etapa escolar, (5 a 7 años), la motricidad fina ya está establecida y desarrollada, aunque siempre se puede mejorar, no es conveniente el uso indiscriminado de prótesis para los lápices y sin la evaluación previa de muchos factores como: Tono y fuerza muscular, postura, cruce de línea media. Lo importante es que la pinza sea funcional y que no le cause dolor o cansancio, lo que le puede dificultar copiar una tarea.

Susana Pereira - Terapeuta Ocupacional - Terapeuta de Conducta

Educadora en Masaje Infantil

Valencia - España